Volver


AGRESIVIDAD, VIOLENCIA

Werner Schafer

Desde hace poco el extraordinario aumento de actos de brutalidad sin sentido, realizados por alumnos, obligan tanto a los órganos estatales como a los maestros Waldorf, a ocuparse con mayor profundidad con el problema. Para estos últimos, se ha realizado este bosquejo. Cuando indagamos en la obra de Rudolf Steiner con respecto a este tema, encontramos bajo “agresividad”, “violencia” nada en las conferencias (GA300) ni tampoco en el léxico antroposófico, ni tampoco nada acerca de ira, terror, rabia, brutalidad. Una importante afirmación breve acerca de furia destructora infantil la hallamos en GA 98, 1. 12. 1907: El niño siente el mismo placer al destrozar rocas etc.,que tienen los seres elementales al ser liberados. (Conferencia, “La misión de la ira”), aquí, por lo tanto, la ira es captada de una manera positiva.

No es posible llegar a una solución del problema mediante consideraciones burguesas (y burguesas antroposóficas), ni tampoco con consideraciones morales o kármicas. Aparte de la regla general de que la agresividad dada como ejemplo a su vez es imitada o de que los adultos iracundos, insensibles y despiadados no pueden ser vivenciados como autoridades en el sentido positivo, mientras que “bondad y comprensión”, etc. promueven lo propio en su entorno, nada nuevo se podrá producir. El problema es mucho más profundo y generalizado.

Cada adulto posee impulsos antisociales más fuertes a modo de fenómeno acompañante del “alma consciente”. Estos impulsos no pueden ser combatidos, al igual como no pueden ser combatidos el hambre y la sed, etc. Sino que deberán configurarse formas sociales de vida de modo tal, que tales impulsos puedan descargarse de modo inofensivo, “gastándose” (ver las conferencias del 6 y 12 de diciembre de 1918, GA 186, “impulsos sociales y antisociales”), por ejemplo “trimembración”, estructuras “generadoras de oral”, etc. En el niño, de “manera natural”, se repiten formas volitivas anteriormente justificadas, tales, como el sentido de conquista romano, espíritu de competencia griego, etc. En el siglo 20 empero, se van agregando de modo cada vez más evidente, incrementos enfermizos de la agresividad, etc., que “en realidad” no pertenecen al ser humano, sino que tienen su misión plena de sentido en la destrucción física, por ejemplo en el órgano digestivo, o, en el sistema inmunológico. El hecho de que estas fuerzas “eructen” (R. Steiner) hacia arriba, hacia lo anímico, es incentivado desde afuera (vale decir por el estado cultural general, o bien, por la ausencia del mismo) y por lo tanto puede ser aminorado únicamente por el cambio de estos incentivos. Sin la comprensión esotérica del conocimiento del ser humano será imposible modificar esta situación. Al respecto, damos algunos principios.

 

“DIAGNÓSTICO”.

Dentro del hombre actúa un “necesario centro destructivo” (el hombre es la envoltura de un foco destructivo), que así mismo se encuentra en correspondencia con las respectivas capas en el interior de la tierra, de las cuales, por ejemplo parten los terremotos y las erupciones volcánicas. Esa fuerza aniquila (no sólo destruye) la materia. Rudolf Steiner nos habla de esta fuerza desde diferentes lados y planos, por ejemplo: 3. 6. 1913 (GA 146), 14 y 20. 1. 1917 (GA 174), 16. 4. 1918, GA 181; 9. 11. 1919 (GA 191); 14 y 16. 5. 1920 (GA 210); 18 y 19. 12. 1920 (GA 202); 9. 4. 1921 (GA 204); 3 y 11. 7. 1921 (GA 205); 14. 8. 1921 (GA 206); 30. 10 – 1. 11. 1921 (GA 208); 8. 7. 1922 (GA 210); 4. 11. 1922 (GA 79). “Detrás del espejo de la memoria (que comienza a formarse aproximadamente a partir del tercer año de vida) se encuentra un foco destructivo en el cual la materia, completamente destruida, es llevada al caos. “Pero, dentro de ese caos, se anuncia el mundo del hijo de Dios”. (23 y 24. 9. 1921 (GA 207).

Ese centro se halla sujeto al plexo solar (6. 11. 1916 – GA 172). A partir del siglo 20 empero, se aflojan las cadenas, que mantienen atado allí a “Satanás”. Este dato ya había sido notificado por Anna Katharina Emmerich,…”he escuchado de que Lucifer quedaría nuevamente en libertad durante un tiempo 50 a 60 años antes del año 2000” .

Los misterios de la India denominan a esa fuerza como Shiva, que a la vez es destructora y creadora. Dado que esa fuerza (el mundo del Dios – Hijo) puede ser desencadenada desde afuera, sin la intervención del hombre de manera activa; entonces, en el mundo se genera la suma de todo terror, tanto en el pensar (“Dschihad”, etc.) como en el sentir y el hacer. (De modo generalizado cobra validez que toda guerra exterior, es tan sólo la proyección de luchas anímicas no resueltas). Todos los métodos psicológicos absurdos, tales como el “grito original”, etc., se basan en el desencadenamiento de ese poder. Cuando esa fuerza, a modo de potencia se desarrolla lentamente y es conducida por el YO, se genera, por ejemplo, la euritmia. En definitiva, toda la Antroposofía es un redentor deshechizo de ese potencial, también, en su instrucción esotérica (“dominio y transformación del dragón”). ¡Todo esto debe ser comprendido, dado que “la misión del hombre moderno es la toma del conocimiento del mal! Todo aquello, que no logramos quitarle al dragón (por ejemplo a modo de Antroposofía), lo utiliza él mismo. Por cierto, que este centro de destrucción juega un rol central en los enigmáticos fenómenos ignorados o desmentidos por la “ciencia”, del espontáneo auto encendido (combustión – incineración) de personas, que desde hace unos 200 años se ha podido observar unas decenas de veces. Mientras que una persona desde su interior se consume completamente por el calor, convirtiéndose en ceniza, la vestimenta, por ejemplo, puede quedar en su perfecto estado, mientras que el metal que se encuentra en la proximidad se derrite. Se evidencian varios fenómenos contradictorios en ocasión de un tipo normal de calor. En el siglo 20 ha acontecido algo empero, que ha evitado de modo amplio, la “misión” en realidad prevista, de redimir esa fuente de todo el mal, aprovechándola práctica y espiritualmente en el sentido creativo: la no aceptación de la Antroposofía a modo de factor cultural determinante en sentido amplio. Por ese hecho, esta fuerza comprimida a modo de “factor cultural” se convirtió en destrucción, violencia, brutalidad, etc. Evidentemente, en el “Tercer Reich”, pero en cierto sentido incrementada también a partir de la década de 1950. En forma directa e inmediata, cobra efecto, a través además de las fuerzas de lo eléctrico – magnético – mecánico en los medios masivos técnicos. No sólo que estos – imposible negarlo – difunden contenidos de violencia (ver por ejemplo D. Gronman, G. de Gaetano. “ ¿Quién les ha enseñado matar a nuestros niños?” (Stuttgart 2002); sino que el efecto mismo de los medios es violencia brutal: de modo comprobable, desconecta al circunspecto y reflexivo yo, y cobra un efecto hipnótico – manipulador sobre la subconciencia – sobre todo el “centro de destrucción” en el plexo solar. La “Flor de loto de los diez pétalos” que allí se arraiga, que se ocupa de la elaboración y la eliminación de los recuerdos – la memoria – de esta manera se encuentra violada. Las remedadas impresiones de tonos e imágenes se graban automáticamente, de modo efectivo pero desprovistas del YO (GA 10, capítulo: “Acerca de algunos efectos…”). Una artimaña propia de todos los adversarios (Lúcifer, Ahriman, etc.) es, desviar la atención de lo fundamental, mediante la remarcación de lo secundario, trivial. ¡Y aquí, se ha logrado con excelencia! Es así, que casi todas las críticas con respecto a los medios, giran alrededor de los contenidos (“que de hecho deberían ser mejorados”) ¡en lugar de ocuparse de la técnica misma! Como la misma ejerce ya un dominio casi completo en el planeta Tierra, desde “la droga inicial de la radio”, hasta TV, CD e Internet, queda en claro cuán difícilmente se podrá hallar una solución sin la eliminación de la causa de agresividad anímica. (A las condiciones previas de poder hacer algo al respecto, cuenta sobre todo, visualizar estos hechos catastróficos, desapasionadamente y con conocimiento, pero, sin histeria ni resignación.

El otro lado del efecto del “Shiva” acumulado que se abre paso, apunta a la tierra misma; hacia aquello que guarda parentesco con él mismo (la capa de aquello que se rompe en añicos, de la “magia negra”, o bien, la “capa del fuego”).

Esto puede hallar la expresión únicamente en un incremento de las catástrofes de la naturaleza de toda índole, en lo más sutil, en los alterados ritmos de la naturaleza, que entran al caos en sus fuerzas. En las ondas electromagnéticas artificiales, hasta las técnicas secretas directas camufladas tales como “HAARP”, etc., y desencadenamientos atómicos cobran efecto además, productos generales por el hombre de un modo directo y devastador sobre la naturaleza y sobre el ser humano. De hecho, se puede tomar la postura de que todo es así como es, correspondiéndose con la evolución humana (así como los campos de concentración, Hiroshima, técnica y genética, etc.) Para aquellos, que piensan de manera diferente, a continuación tratamos de hallar una “Terapia” .

 

Imaginemos, que una tormenta ha provocado la caída del techo de una casa a la cual ahora penetran el viento, la lluvia, el frío, etc. ¿Qué podríamos pensar por ejemplo de moradores que quisieran remediar el problema mediante canales de salida del agua en el piso, sales absorbentes de la humedad, vestimenta, calefactores de todo tipo y oraciones – sin tomar en cuenta la causa principal: renovación del techo?

Del mismo modo como en esa casa averiada no puede ser instalada una cultura familiar humana, ni salud, ni sentido de la vida cuando el “techo” en lo real no es edificado de la mejor manera posible – el cual, de otro modo, de ninguna manera puede brindar amparo frente a efectos difíciles de manejar. Recién después podrán ser tomadas en cuenta medidas adicionales (calefacción, quite de humedad y moho, etc.) Vale decir, en el caso de que el destructor de la naturaleza y del hombre – su portador principal – no puede ser llevado a cabo el dominio auténtico del potencial de la agresión: los medios técnicos deben ser reconocidos como absolutamente anti-humanos, anti-antroposóficos, anti-cristianos y deberán ser alejados de los niños, el mayor tiempo posible. (Y también del eterno “Niño – espiritual dentro del adulto; vale decir, del yo verdadero, que justamente debe ser desarrollado mediante la Antroposofía !). Al contrario de lo que muchos piensan, esto es absolutamente posible, sobre todo, en el caso de la “conjunción de muchos con la misma idea”, en lo que al lugar y al asunto se refiere. (Existen por cierto, experiencias prácticas de índole exitosa). Sobre esa base “formadora de techo”, lo demás luego podrá cobrar sentido. Las fuerzas destructoras anidadas en el hombre, no deben ser desplazadas, ni tapadas; menos aún, en la proximidad de la pubertad (con anterioridad son suficientes la protección y las posibilidades múltiples – “Waldorf” del ciclo inferior). ¡Deben ser utilizadas en el buen sentido! ¡Pero, de ninguna manera, mediante “el buen uso de los medios”!.

Lo que allí reluce como éxito del momento y aparente, tendrá amargas consecuencias, es engaño.) La antes mencionada conferencia, GA 58, 1909, “la misión de la ira” ofrece una indicación decisiva. La noble ira justificada, se radica en el alma sensible, “antes de haber llegado a la madurez, en luminosa claridad, con respecto al juicio a asumir, para transformarse más tarde en fuerza de generoso y comprensivo amor, sentido de la verdad y claridad en lo que a la justicia respecta.

Por lo tanto, la fuerza colérica, en un principio agresiva y exenta de contenido, puede ser transferida a una noble ira frente a la experiencia de injusticias. Esto, según la experiencia, no es tan difícil. Muchas cosas hay, acerca de las cuales justamente el joven puede inflamarse en “sagrada ira divina” (sobre todo, como colérico, en el melancólico, basta la misericordia): que un manojo de ricos lo poseen todo y que sienten una total indiferencia frente al hecho de que millones mueran de hambre, además de otras injusticias profanas. Al respecto, el maestro puede suministrar hechos correspondientes, como puntos de partida para los trabajos anuales o proyectos, etc. También llevar al escenario obras policiales artísticamente buenas. O la increíble historia del bio-granjero canadiense, que fue condenado por el hecho de que en su campo había volado polen de maíz transgénico que ahora tuvo que cosechar sin autorización. Pero, también dramas auténticos, como el “Guillermo Tell” de Schiller, o “Juana de Arco”, etc. Hay asuntos más complejos, tales como la “Farmacología mafiosa”, la política bancaria, la CIA , la política, etc., que puede ser digerido recién a partir de los 18 – 19 años. Existe, por cierto, el peligro de que si demasiada gente se ocupa del tema, la “Escuela Waldorf ” sea sospechada como productora de ciudadanos enemigos del Estado y de la Economía ! En el caso, de que consecuentemente se llevasen a cabo todos los consejos dados por Rudolf Steiner, se impondrían naturalmente los fiscales que denunciarían a “Waldorf” como secta! Pero ¿tal vez eso sería lo mejor, lo más sincero? Por supuesto tendremos que cuidar de que los alumnos no bajen desenfrenadamente los “infos” de Internet mediante el clic del Mouse, sino redactar informes propios. Puesto, que todas las drogas no sólo es “anti-Waldorf”, sino anti-humano y no es equiparable.

 

Tenemos que tomar en cuenta que existen tres tipos de estupefacientes (que actúan bajo el modo del rodeo o de la destrucción del yo, del estado consciente – despierto):

 

•  Las drogas sustanciales (del alcohol y el hachís hasta las drogas duras y las drogas de moda).

•  Las espirituales humanas, que a través de sectas peligrosas (conductores de las mismas) o Popstars, etc. Reúnen masas humanas.

•  Las toxicomanías sub-sustanciales (medios técnicos). Contra los tres, lo único valedero es la protección, en caso necesario, la defensa (¡evitando el proceder no pedagógico! sobre todo, los padres deben ser instruidos como participantes activos de la pedagogía protectora).

 

Una enseñanza especializada en “Mirada hacia el mundo” con informes y disertaciones de los alumnos, etc. Podría servir para neutralizar la “ira” (bronca) y a su vez permitir, que el maestro sea aceptado como hombre de mundo (¿Qué están mostrando realmente las fantásticas imágenes de Marte? ¿De hecho, qué nos están mostrando? ¿Qué realizan las señales de transmisión, hasta generar aquí una imagen? ¿La gripe aviar existe realmente? ¿Qué acciones corren en contra de opositores a AKW y las técnicas genéticas? ¿Dónde están, y qué padecen los “héroes: tales como el “Rebelde agrario” Sepp Holzer y similares?

¿Qué padeció el americano Berg, públicamente desprestigiado por Internet en mayo del 2004? Para ello, y para el “terrorismo” Internet es muy apropiado, allí se realiza lo que de otro modo sería imposible. De ningún modo es un “aparato neutral!” ¿Existen auténticos círculos cerealeros y de qué manera, la prensa y los medios distorsionan la información real, mediante historias estúpidas al respecto)? ”O, queridos alumnos, ¿qué temas les gustaría que profundicemos?

 

De esta manera, a su vez podría ser retocada la masa de la fuerza destructora acumulada a causa del rechazo del espíritu, siendo orientado hacia el bien.

Como comprobantes de los diversos opositores a Rudolf Steiner (Por ejemplo a través de Hitler y compañía) existen suficientes documentaciones que igualmente deberían ser manejadas de esa manera. O, biografías de nobles luchadores de la actualidad, etc. Esa “montaña”, que actúa de un modo cada vez más destructor y brutal, se expande sobre el karma personal (donde por ejemplo alumnos otrora enemigos – pueden tener diversos problemas) como karma mundial acumulado, generando parálisis general, sin culpa personal!

Lo aquí escuetamente presentado, podría ofrecer material para muchos seminarios (que de hecho serían muy necesarios).

 

Para finalizar, algunos pasajes con respecto al “odio”.

 

Cósmicamente, el odio es la fuerza necesaria para la individualización (13. 9. 1918, GA 184). El odio puede ser un amor que ha permanecido en lo sub-consciente (6.3.1913, GA 62). La figura humana está formada a partir de frialdad moral (huesos) y odio (sangre). Esto conduce al carcinoma social (11.11.1923, seguramente, con miras a la intentona hitlerista, dado que, según la agenda, R. Steiner había preparado un discurso diferente y el 10 de noviembre dice, frente a las noticias del diario: “Si estos señores toman el poder, ya no podré pisar suelo alemán”.

A pesar de que la intentona fracasó, de inmediato steiner disolvió a la vivienda y la editorial en Berlín, siendo llevado a Dornach).

El “odio” es un miedo reprimido. (Manifestado en diversas clases esotéricas).

 

RESUMEN

 

•  Compenetración del problema mediante la postura desapasionada por parte del adulto: “No insensible, pero imperturbable”. Ya ese hecho tendría un fuerte efecto a modo de “imponderable” que no debería ser subestimado! Sobre todo, cuando como consecuencia seguirían cambios en el estilo de vida.

•  Toda posibilidad de protección posible frente al mayor incentivador directo del “centro de destrucción” a través del “doble electro – mecánico” (GA 178, St . Gallen) debería ser desarrollado enérgicamente para los niños de la nueva generación (para los niños mayores, ya demasiado habituados a algunos o a todos los 3 tipos de toxicomanía, el gran esfuerzo tendría poca posibilidad de éxito y sería sustraído a los niños menores. Indispensable el trabajo de esclarecimiento con los padres).

•  Transformación de la fuerza de ira de “la juventud”, en justa ira “sagrada”, acerca de reconocidas calamidades en política, la vida social (y como víctima indefensa), la naturaleza. Al respecto, ofrecer alternativas referidas a informaciones y exposiciones, en lugar de los medios técnicos. (Publicaciones, invitados que brindan conferencias, excursiones, iniciativas, etc.)

•  Metas permanentes, hacia las cuales se orienta constantemente el esfuerzo: auténticos espacios libres provechosos, salutíferos, de una manera formadora de moral (forma, color, materia, etc.) en el sentido de un proyecto conjunto, orgánicamente funcionando (“oasis cultural”: la última indicación social, brindada por Rudolf Steiner. Ver KeyserLingk: Kober witz 1924, Stuttgart.